Rosenell Baud, una de las artistas más importantes del grabado en Colombia, presentó en el Museión de la XIII Feria de la Ciencia y la Tecnología en Corferias, una impactante y bella instalación de su obra gráfica: EROSIÓN. Este trabajo experimental requirió un amplio desarrollo investigativo que se extendió por más de seis años. La temática central de la feria estuvo orientada hacia los temas ambientales, en especial el agua, con el propósito de crear conciencia de la importancia que tiene para Colombia este líquido precioso desde una perspectiva científica e innovadora. La maestra Baud ha dedicado su vida entera a la contemplación de la naturaleza plasmando sus sensaciones en varias expresiones artísticas, en especial, la pintura, el dibujo y el grabado.
En esta entrevista Rosenell Baud nos acerca a la esencia de su exploración y a la experiencia que ella significó.
En esta entrevista Rosenell Baud nos acerca a la esencia de su exploración y a la experiencia que ella significó.
STB. ¿Qué es exactamente EROSIÓN?
RB. ¿Erosión? Déjame decirte que es un título
simplemente. Que de repente se adapta de manera especial y rigurosa a la idea
de mi trabajo y también, al tema principal que propuso Expociencia este año en
el Museión.
STB. ¿Cómo nació la idea de esta instalación?
RB. Después de la exploración que duró más de
seis años, quise mostrar ese universo que me revelaba cada tronco. La incisión
de cada pieza de grabado. Historias que se anudaban a través del tiempo
¿Instalación? Una maravillosa y única solución para mi de presentar y exhibir
200 piezas de madera, 200 troncos de varias formas y tamaños con sus
respectivos sellos de grabados.
STB. ¿Qué sentimiento, qué sensaciones despierta
en ti el grabado?
RB. Pasión…siempre, desde siempre… mi camino
recorrido hasta ahora.
STB. El dibujo sobre la pancha de grabado es la
exploración de cada pieza, de cada tronco que rescataste. ¿Cómo les devolviste
el alma? ¿Cómo tomaron de nuevo la vida? ¿Qué nos quieren decir?
RB. Por el agua, por el fuego, por el hombre.
Varios de estos troncos que fueron separados de su realidad temporal, pasaron
de la basura, de los desperdicios, de los maltratos, a participar de mi obra.
Una oportunidad y una nueva identidad para reconocer en cada pieza la fuerza de
la vida, confirmado por el sello de grabado en cada uno de ellos.
STB. Las formas que encontramos en cada pieza
son impresionantes y hermosamente labradas. Algunas piezas son altas, gruesas y
otras delgadas. En varias se perciben formas humanas. Y los sellos metálicos
crean las sensaciones de vida, de latidos que se anudan como dice tú, a través
del tiempo ¿Cómo montar la instalación para que el público pueda sentir, ver y
tocar la instalación?
RB. Digo a menudo: mirar para ver. Tal vez no
fue suficiente, pero hicimos un trabajo de manera que el público pudiera circular
entre las doscientas piezas que formaba la instalación. Que se pudieran
acercar, tocar, sentir cada galería excavada en los sellos de grabado.
Contemplación infinita de la naturaleza vegetal. El ciírculo me pareció una
idea buena para involucrar a los visitantes, y funcionó.
STB. Viendo todo este proceso ¿cuál crees que es
el papel del arte como instrumento de comunicación?
RB. El arte como proceso de comunicación crea
un lenguaje propio que sale de la íntima relación del artista con la imagen o
el objeto seleccionado. Yo canalizo mediante mi obra una idea de algo que me
emociona, me molesta o me inquieta. El espectador asume desde su necesidad y la
entiende a su manera, y cada uno toma de ella lo que más le afecte, le diga o
le transmita en ese momento.
Como complemento
de la entrevista, usted puede ver a continuación, el documental realizado por Sergio Trujillo
Béjar y Felino Films.